Durante el domingo 22 y el lunes 23 de octubre, las lluvias en el centro del país, en la zona núcleo agrícola, favorecieron la situación del campo y fueron un gran alivio para los productores, que vienen sufriendo las consecuencias de la sequía en el primer semestre del país y se hallaban a la espera de que mejoren las condiciones climáticas.
En este sentido, de acuerdo a lo que expresó la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR), las lluvias marcaron “un punto de inflexión en la situación, ofreciendo un rayo de esperanza para los productores”. De hecho, la llegada del agua fue destacada como la noticia más relevante por la entidad santafesina.
Qué efectos tuvieron las lluvias en la siembra de los campos
Teniendo en cuenta que la producción de trigo venía sufriendo un deterioro, principalmente como consecuencia de no poder realizar la siembra por la falta de humedad, las precipitaciones registradas permitieron retomar la actividad y renovar las esperanzas sobre la soja y el maíz.
“Las esperadas precipitaciones finalmente llegaron a la zona núcleo durante el fin de semana. Los datos acumulados en las últimas 72 horas dieron cuenta del alivio tan esperado, considerando que hasta el viernes pasado el 90% de la región estaba bajo condiciones de sequía y escasez hídrica, causando preocupación entre los productores”, explicó BCR en el informe correspondiente a esta semana.
Registros puntuales de las lluvias por zonas
En el documento, la organización detalló las precipitaciones alcanzadas en distintas localidades:
- Rosario: 36 mm
- General Pintos: 22 mm
- Chovet: 20 mm
- General Villegas: 18,2 mm
- Bigand/Junín: 18 mm
- Guatimozín: 16,8 mm
- Rojas: 12 mm
- Chacabuco/Labordeboy: 10 mm
- Rufino: 88 mm
- María Teresa: 44 mm
- Irigoyen: 40 mm
- Clason: 38 mm
- Lincoln: 34 mm
- Zavalla: 31 mm
- Pujato: 25 mm
- Godeken/Álvarez: 24,8 mm
- Pellegrini: 24 mm
- Canals: 22,2 mm
Impacto en la siembra
Tomando en consideración que hasta el viernes 20 de octubre, dos días antes de las lluvias, “el 90% de la región núcleo estaba bajo condiciones de sequía y escasez hídrica, causando preocupación entre los productores”, de acuerdo a los datos del instituto rosarino, la incertidumbre disminuyó.
El trigo y el maíz son los dos productos más afectados por la falta de humedad y las heladas. De hecho, en Carlos Pellegrini, remarcó BCR, “se estimaba un 10% de daño por heladas y un rendimiento proyectado que se había reducido a la mitad en comparación con un año normal”.
En este marco, los trabajadores rurales se habían visto forzados a realizar un recorte en la siembra de maíz. De los 1,57 millones de hectáreas destinadas a este grano, se liberaron 200 mil que serán reemplazadas por la soja.
